El efectivo sigue siendo, hoy en día, el método favorito de pago. Sin embargo, su gestión es poco segura. La caja autocobro Cashlogy es la nueva tecnología para pagos en efectivo en el punto de venta, que automatiza todos los procesos de gestión del efectivo y simplifica su gestión.

La implantación de este método de gestión de efectivo está en auge. Y es que, además de la facilidad que se le brinda al usuario, se trata de una forma de pago mucho más segura, puesto que solo accede a la caja autocobro aquellas personas que estén autorizadas para ello. Así, esta solución permite realizar un control de efectivo del negocio mucho más eficiente.

El uso de esta caja autocobro, además, evita la posibilidad de utilización de billetes falsos por parte de los usuarios, lo cual lo convierte que el efectivo se convierta en una forma de pago mucho más tranquila para el negocio, llevando un control exacto sobre este. Esto también se traslada al usuario, el cual aumenta su confianza hacia la marca, al evitar errores en los cambios y ser una forma mucho más ágil de pagar en su negocio.